martes, 27 de marzo de 2012

Cartas del siglo XXI ... S.t: D

Estas en las palabras...

De una manera casi física siento la gravitación de los libros, tiempo disecado y conservado mágicamente.

Sentí que él estaba en su eternidad y no en las palabras.

Versos que se anclaron en un sueño que se repite solo al amanecer .

Las noches son solo desiertos sin cantos de angeles ni cupidos y el día recobra de nuevo en mi esperanzas de ver tan bello rostro, de sentir la piel que un día recorrió mi sendero y las huellas que tanto he querido olvidar.

Palabras que crean en mi poemas de amor. De alguien que una vez estubo y estará de forma eterna como yo quedé aunque solo fuera como nombre gravado en su piel; perfilado y dibujado con tanto amor y miedo ... Miedo solo a perderse en el olvido.

Hoy los libros no expresan lo que busco son solo letras sin sentido que leo con el único afan de no pensar en ti; busco en ellas secretos para poder cambiar y ser fuerte ante este dolor que recorre mi alma. Aquella que dejé olvidada como a mi propio ser.
Un Ente con cuerpo que vaga por el bien de un futuro feliz.

¿Que felicidad es esta que vive cada amanecer perturbada por pensamientos hacia algo que no tiene lógica alguna?

Hoy escuchare tu voz y llenará de nuevo este hueco que solo tu puedes llenar.
Perfumaré mi pelo y mi piel que aunque no llegue a verte crea en mi sueño diario que te fundes al oler mi esencia.

Oh! Mi musa, mi Hercules, mi Ulises... ¿como sabias que esto era un imposible?

Dios! aunque no crea que existes dañas mi alma y te regocijas en mi incertidumbre. Ya has elegido al Oraculo que ha escrito mi destino, en paginas en blanco, ¿porque me haces sufrir con tus juegos de azar? Ahora que necesitaba más cerca su aliento tu cortas todos los caminos que podian acercarme a él...

No llores...

Solo uno mismo forja su propio destino hasta el de la muerte.

Muerto en vida...

¿como esas palabras han podido hacer tanto daño? igual que la palabra núnca...jamas...

¿que poder tienen las palabras que tanto daño me hacen, si leo cada día miles de ellas y nada?

¿porque cuando son pronunciadas por tu boca se convierten en enigmáticas y poderosas?

Y sin ellas... el tiempo está disecado, eterno sin felicidad.


Hoy sentí de nuevo que estabas... en las palabras.